El mundo busca explicaciones para las guerras incesantes del siglo XXI en el Medio Oriente y solo encuentra confusión y abstrusas teorías. Aunque ha abandonado lo sobrenatural y poco se preocupa del pasado, cree en la fábula que han inventado los reyes de las comunicación moderna: las disputas en el Islam por conflictos religiosos del siglo VII DC son la causa de todos los males de los territorios que albergan la gran riqueza petrolera del mundo. Es la lucha entre sunitas y shiítas la que todo lo explica. Así lo cree la modernidad con una reverencia que es anacrónica por decir lo menos. Y curiosamente olvida su economicismo agobiante y no ve el elefante a sus espaldas, la fuerza de los intereses del mercado del petróleo, un mercado que era anualmente hasta el 2014 de más de 3 trillones de dólares (nomenclatura de USA) y que desde Octubre de ese año hasta hoy se ha encogido a la mitad, evaporando 1,5 trillones de dólares anuales. Cifras astronómicas, irresistibles para la codicia humana.
El fin del Petróleo en USA
La historia del petróleo de los últimos cien años en Estados Unidos se hizo dramática en los primeros años del siglo XXI y hace difícil creer que las autoridades de ese país presenciaron impávidas el derrumbe de la producción que comienza en el 1985 (tras veinte años de altas producciones) y que en el 2005 llegó tan abajo como la mitad de lo que fue normal entre los años 1965 y 1985. ¿Previó el gobierno norteamericano el fin de una actividad que consideraban fundamental para la seguridad de los Estados Unidos?