viernes, 30 de septiembre de 2011

Rusia y Europa: Obstáculos en el Camino

Hay  situaciones que dificultan una relación amistosa y normal entre Rusia y Europa.

 Es necesario tenerlas presentes para tratar de entender la política exterior rusa. Se puede destacar algunas de las principales:


1) El problema de las visas. Las autoridades occidentales no permiten que los rusos viajen libremente por el territorio de la Unión Europea ni por el de los Estados Unidos.

2) El rechazo occidental a la incorporación rusa ya por quince años a la Organización Mundial del Comercio. Son socios de ella más de 150 países  a pesar que muchos  están lejos de alcanzar los méritos de Rusia.

3) El intento de la OTAN y de la Unión Europea de extenderse hacia países que tradicionalmente han sido muy cercanos a Rusia (Ucrania, Bielorrusia, Azerbaiján, Georgia)

4) La campaña implacable y permanente de desinformación sobre la realidad rusa  en la que participan hasta los medios mas destacados de Occidente,  ejemplo clásico del temible sistema occidental de creación y destrucción de imágenes.

5) El intento de Estados Unidos de  establecer un escudo antimisiles en Europa Central y que Rusia estima persigue debilitar su posición estratégica.

6) Las calificaciones sobre la economía rusa que son absurdas si se las  compara con las de las vapuleadas economías occidentales,  que increíblemente hasta hoy reciben la aprobación plena de las calificadoras internacionales. Rusia tiene una deuda pública del 10% de su PGB, un fuerte superávit comercial, ha acumulado reservas de divisas por más de US$500.000 millones y este año ya ha restablecido el equilibrio en sus cuentas fiscales. A pesar de ello se la sigue considerando una economía de alto riesgo. (¿Y Francia, Italia y España?)

Hy que sumar a los puntos anteriores la incapacidad o el desinterés occidental por entender a la sociedad rusa, olvidando  que  su trayectoria si bien tiene un origen común con las europeas,  ha seguido  cursos bien diferentes en buena parte de su historia. Así sucedió en el trágico siglo XX.. En él por setenta años, Rusia vivió en el sistema soviético y  en una generación entre 1914 y 1945, debió digerir la muerte violenta de uno de cada cuatro ciudadanos. Difícil que  entiendan países que han vivido en la abundancia y que casi no fueron tocados por las tempestades que asolaron a Rusia.

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viernes, 16 de septiembre de 2011

El Chantaje Griego


Un default griego o la salida de Grecia de la Zona del Euro, tendrían graves consecuencias para el resto de los países que participan en ella, en términos de menor crecimiento y del daño a los bancos europeos. La deuda pública griega que era una 105% del PGB griego en el 2007,  ha llegado a un 152% . Lo increíble es que antes de la crisis ya era el doble de lo tolerado por los países de la Unión Monetaria. El déficit fiscal  alcanzó en el 2007 al  10%  del PGB griego y la Cuenta Corriente al 45%. No podía ser más evidente que Grecia debía entrar en un proceso dramático de ajuste. Han pasado cuatro años y la situación ha mejorado pues los indicadores anteriores se han reducido a la mitad, pero están lejos de ser satisfactorios. Ante esta catástrofe la sociedad griega ha hecho todo lo posible  para evitar o reducir el ajuste, sabiendo que sus acreedores por la gravedad de la situación, deberán asumir inevitablemente parte del problema.   Así el ajuste griego ha sido poco significativo. .

Entretanto para otros países de la Unión Europea, de los que nadie habla, las cosas se han desarrollado de una manera bien diferente.  Son de Europa Central o del Este y están fuera de la Zona del Euro. Para ellos la alternativa fue “hacer buena letra o podrirse”. Al fin de cuentas sus suertes no son de vida o muerte para la Unión Europea y por consiguiente deben hacer méritos si quieren perdurar en ella. ¡Un doble estándar impecable!

A título de ejemplo Rumanía. Su deuda pública era del 20% del PGB en el 2008, el déficit en cuenta corriente 13% y el déficit del gasto público, 4,8%. Un cuadro mucho mejor que el que presenta Grecia hoy después de cuatro años de ajuste. Sin embargo Rumanía redujo 25% el sueldo de los empleados públicos, subió a 65 años la edad para jubilar, disminuyó en 74.000 personas  la dotación de empleados públicos y subió el IVA al 24%. Resultados: crecimiento del 1,5% en el PGB este año y 4% esperado para el próximo.

Tiene razón Alemania al exigir un ajuste mucho mayor de la economía griega. De otra forma se puede entronizar en la Unión Europea: un trato injusto: garrotazos (FMI) para unos y consideraciones especiales para los que pueden abusar. Eso sería arriesgar el futuro de la asociación.

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viernes, 9 de septiembre de 2011

¿A quién persigue Europa en Libia?

Seis meses le tomó a Europa doblegar a Kaddafi. Teóricamente se trataba de proteger a las poblaciones civiles de la represión del gran y casi eterno jefe libio. Así por lo menos lo entendieron rusos, chinos, alemanes, hindúes y brasileños, que se abstuvieron en el Consejo de Seguridad de la ONU cuando se votó la resolución que permitió la acción de la OTAN. 

Francia e Inglaterra hicieron de cabeza en esta generosa iniciativa (al fin y al cabo la historia muestra que les gustan las aventuras imperiales) e incluyeron, entre otros, a compañeros remotos (pilotos daneses, aviones suecos). Fue una guerra a la distancia y desde la seguridad de la alta tecnología bélica. La sangre de los civiles inocentes corrió lejos de los pilotos y aviones encargados de los bombardeos. Será así difícil para los tribunales de La Haya interesados en los genocidios, identificar a los culpables de los “errores occidentales”.
Quién sabe cuántas víctimas ellos ocasionaron en este misterioso conflicto que explota después de 40 años de tolerancia, amistad y negocios entre Kaddafi y Europa.

¿Podemos creer que el objetivo real tras la acción de la OTAN era la protección de los civiles libios o incluso el fin de Kaddafi? Difícil creer tanta bonhomía. Europa suele ser prosaica, preocupada de su bienestar material y poco interesada en el prójimo. ¿No nos habrán dado para nuestro consumo una “rueda de carreta”? Un famoso economista norteamericano que creó los Reaganomics (Paul Craig Roberts), escribió en el mes de abril que el objetivo real de la acción de la OTAN eran los intereses chinos en África, que no eran del gusto de una Europa que no acepta extraños en su vecindario. No es raro entonces que al iniciarse las acciones bélicas 30 mil chinos abandonaran Libia, y que a China el conflicto le significara una pérdida de US$20.000 millones. No es una cifra que destruya o afecte gravemente a este país, pero podría ser una dosis adecuada de veneno para el tamaño del gigante, suficiente para hacerlo consciente del costo de inmiscuirse donde no le corresponde. De paso, y de acuerdo a una vieja teoría, la guerra podría haber movido algo a las economías desfallecientes de Europa. 

viernes, 2 de septiembre de 2011

Universidades: Preguntas y más Preguntas

Sonó a escándalo la opinión del Presidente Piñera al llamar a la educación “bien de consumo”. En un conflicto estudiantil que tiene fuertes connotaciones comerciales (“Nos cobran caro y la calidad es mala”), podría ser útil colgarse de la frase del Presidente. Así se podría recurrir al SERNAC para revisar los contratos entre los estudiantes y las universidades. ¿Son abusivos? ¿Se respetan? ¿Cómo es la “letra chica” de ellos? ¿Cumplen las universidades con lo que dicen ser? ¿Cómo garantizan el cumplimiento? Se podría hablar también de publicidad engañosa ¿No vemos todos los días en los “medios” como las universidades prometen una vida de felicidad y grandes placeres (como dice un cantante mexicano) a los potenciales alumnos?

Ha sido sorprendente el aumento del costo de la educación universitaria. ¿Colusión? ¿Aumento explosivo de la demanda a causa del crédito con aval fiscal? ¿Se normalizará esta situación si esperamos un aumento de la oferta (al fin y al cabo esa es una consecuencia beneficiosa del “lucro”, chivo expiatorio de este conflicto)? ¿Qué explicación ofrece al respecto el Consejo de Rectores? ¿Intervendrá el ministro de Economía en defensa de las familias chilenas y de los jóvenes, que aún pueden alegar ignorancia en materias universitarias?

El Presidente con su frase permite vincular la educación universitaria con La Polar. ¿Se les habrá ofrecido a los alumnos un “llegar y llevar”? ¿Tendremos en nuestro sistema universitario una POLAR con mayúsculas? ¿A cuánto ascienden los créditos impagos y, por tanto, la responsabilidad fiscal? y, ¿cuántos son los egresados frustrados, los que no han encontrado “la tierra prometida”?

 Más de tres meses de conflicto y aún no conocemos la respuesta a estas incógnitas. Hemos aprendido que hay “universidades complejas” y otras que no lo son. Las “complejas” comprenden lo que siempre hemos entendido por universidad, el saber universal. Las otras debieran llamarse Institutos Profesionales, que eso son. Centros de enseñanza de infinitas profesiones. A éstas últimas parece que se les puede aplicar sin que se ofendan, la ya famosa frase presidencial.