El endeudamiento privado español creció vertiginosamente a partir del 2004, pasando de un 120% del PGB al 210% el 2009 (hoy sigue igual, más de US$3 billones. En Chile es 70% del PGB). Fue lo que impulsó a la economía española la década pasada. Cuando se terminaron los aumentos de la deuda privada, la economía se detuvo y no crece desde entonces, a pesar de los esfuerzos del Gobierno español que llevó el déficit del gasto público al 10% del PGB a partir del 2008. Una deuda pública razonable al 2008, hoy llegó a niveles peligrosos gracias al financiamiento de estos déficits.
Ahora España debe reconvertir su economía para generar recursos que puedan pagar la deuda tanto pública como privada. Pero resulta trágico que los deudores difícilmente podrán hacer frente a sus compromisos, porque sus negocios quedarán sin sustento por el giro necesario de la economía desde las importaciones y el gasto, hacia las exportaciones y el ahorro. La banca española en una situación ya precaria, podría quedar en una situación imposible. Hoy enfrenta una morosidad del 10%. Difícil que mire con simpatía un ajuste económico que hará por un tiempo muy difícil la vida de sus instituciones.
La ayuda a los bancos de España proveniente de la Eurozona por 100.000 millones de euros, parece claramente insuficiente. El problema español se mueve en otra magnitud, la que señalan los créditos "riesgosos" del Santander y del BBVA que se sitúan en US$1,1 billones (millones de millones), según el Wall Street Journal, casi un 50% de sus carteras. Así, no sería extraño que todo el sistema bancario español tenga créditos "riesgosos" por al menos US$2 billones.
La magnitud del descalabro hace pensar que la sociedad española hará un ajuste de cuentas radical con la política y los políticos de la “plata dulce” que en medio de la frivolidad de la deuda, hundieron al país. ¿Resistirá el Estado Español? ¿Se derrumbará para dar paso a nuevas realidades como el Estado Vasco y el Estado de Cataluña? Veinte años atrás la URSS se disolvió pacíficamente en medio del caos económico. Hoy podría ser el turno de España.
Publicado en Estartegia