miércoles, 16 de noviembre de 2016

¡Y GANÓ TRUMP!

Sorpresa en todo el mundo y pesar incontenible de académicos y políticos. ¿Cómo se llegó a tamaña desorientación? La respuesta ha sido simple: Las encuestas ¡Nuevamente se equivocaron las encuestas! ¿Será tan sencillo el asunto?

Las élites norteamericanas al margen de la realidad

Quizás lo más sorprendente del terremoto político norteamericano es  la increíble falta de información de las élites. ¿Culpa de ellas? En buena medida sí porque es imperdonable que no se cercioren que comen y que se tragan. Habría que aplicar para ellas el viejo dicho de los programadores "Garbage in, garbage out". "Entra basura, sale basura". Las infinitas opiniones de los "hacedores de opinión" se han alimentado de basuras, y por eso por meses propalaron solo basuras. Así lo demostró la votación del 8 de Noviembre que dejó atónitos a analistas, comentaristas, sabihondos de la política y políticos. Para ser justos no toda la culpa es de ellos si bien la importancia que aparentan hacía esperar de ellos un análisis un poco más profundo de sus fuentes. Si lo hubiesen hecho se habrían percatado de la visión parcial de todas ellas limitadas a satanizar la figura del "intruso", la de Donald Trump. ¿No les pareció sospechoso que no hubiese referencias en la Mass Media a un protagonista inevitable, la sociedad norteamericana y sus opiniones sobre el mundo político? Habría bastado que mirasen unas pocas indicaciones de las investigaciones sociales del Pew Research Center, una institución profesional que merece la aprobación de moros y cristianos, para darse cuenta que el mundo político norteamericano caminaba sobre arenas movedizas. A lo largo del año este Blog lo hizo presente en diversas columnas (Ésta, ésta, éstaésta y ésta) porque se trataba de una situación de las que se caracterizan con un "más claro echarle agua".

A las "élites" se les puede en verdad aplicar el dicho  "No hay peor sordo que el que no quiere oír, ni peor ciego que el que no quiere ver". Las élites demostraron ser ciegas y sordas. Ignoraron lo que bien veían y sentían sesenta millones de votantes en Estados Unidos y lo que vieron hace tiempo Trump y sus secuaces, la elección presidencial de este año como una oportunidad única para derrotar al "Establishment" y remover hasta sus cimientos al monstruo en que se ha convertido el sistema político de Estados Unidos.

La cruda y dura realidad del sistema político de Estados Unidos

Los incautos observadores y los que se auto titulan como partes de "la élite", o bien por pereza o mala intención no quisieron ver ni oír, o por frívolos fueron engañados por la "Mass Media" y todos sus obedientes servidores. Con un mínimo esfuerzo intelectual ellos que posan de grandes académicos habrían visto "al Rey desnudo", la cruda y dura realidad del sistema político de Estados Unidos al que la ciudadanía caracteriza por servir los intereses de minorías poderosas en vez de preocuparse de las necesidades del país y de los electores, con autoridades que se perciben como corruptas, que frustran y enojan a la gran mayoría de los norteamericanos. Habrían visto el desencanto con los partidos y la pésima opinión que se tiene de los congresistas. Y suma y sigue.

Repitiendo el "nadie previó el resultado de la elección presidencial"

Quizás son éstas realidades muy fuertes para los lobbystas y operadores políticos que se pasean en los "cocktails" de Washington DC disponiendo en forma irresponsable de vidas y haciendas de millones de seres humanos a lo largo y ancho del planeta, y que saben de la sangre inocente que corre por las arenas de los desiertos y ciudades del Medio Oriente solo por películas de Hollywood. Con un poco de esfuerzo se habrían podido asomar a la ventana de la democracia norteamericana y ahorrar a sus lectores ahora después de la elección, el espectáculo tedioso de declaraciones (casi unánimes en los círculos del poder en los países occidentales por lo demás) repitiendo estúpidamente el "nadie previó el resultado de la elección presidencial", o el "inimaginable"... para después declararse en "Estado de Shock".  Klugman el Premio Nobel de Economia escribió después de la elección en el New York Times: "Dios sabe que es claro que casi todos en  la Centro Izquierda incluido yo mismo, estábamos en la ignorancia sobre lo que funciona para convencer a los votantes"

Si ellos hubiesen profundizado un poco en lo que sucedía en la sociedad norteamericana se habrían encontrado  con un espectáculo desagradable y repulsivo: la "Mass Media" mintió, (aún miente) sobre la elección y los candidatos como fiel, potente y poderoso militante del "Establishment". ¿Por qué en vez de desparramar basura sobre Trump, no dieron cuenta oportuna de la penosa opinión de los norteamericanos sobre sus políticos y sus instituciones políticas? ¿No era un hecho relevante? En vez y dejando traslucir su mala fe y sus intereses inconfesables falsearon a lo largo de la campaña  las encuestas y anticiparon una derrota vergonzosa y ridícula de Trump.

La Mass Media mintió con sus encuestas sobre el resultado de la Elección Presidencial

El día 8 de Noviembre en la mañana Real Clear Politics respetado de manera unánime en Estados Unidos, mostró que el promedio de las encuestas daba a Hillary Clinton de ganadora por 2,9% de los votos lo que le permitía hacerse de la mayoría de los votos electorales. Pero ese promedio ocultaba el hecho que los grandes Medios en sus propias encuestas profetizaban el triunfo de Hillary Clinton todos por 4% (New York Times-CBS; ABC-Washington Post y The Economist) excepto NBC- Wall Street Journal que lo anunciaba por 6% al igual que la Universidad Monmouth. Ésta última tuvo una trayectoria en sus predicciones tan extrañas como las de ABC-Washinton Post, un caso digno de estudio de un encuestador con militancia política o de incompetencia profesional. Fox un medio aparentemente favorable a Trump también lo dio por perdedor por 4%. A la inversa Los Angeles Times partidario de Hillary Clinton, dio a Trump de ganador por 5%. Estos últimos dos Medios son "casos especiales y raros” por lo que es mejor no incluirlos en este análisis. Faltaría por considerar a Bloomberg cuyo campaña en contra de Trump fue potente, y que dio por ganadora a Clinton por 3%; un poco más bajo que los otros grandes Medios; sin embargo su manifiesta parcialidad por Hillary Clinton hace aconsejable abstenerse de incluirlo en el grupo de las encuestadora independientes.

¿Cuál fue el pronóstico de las encuestas independientes de los Grandes Medios, de la “Mass Media”? 

Rassmussen 2% de ventaja para Hillary Clinton, Quinippiac 1% para la misma candidata e IBD 2% de ventaja para Trump. En promedio las tres anunciaban el día de la elección que Hillary Clinton ganaría por .3% en el voto popular, casi igual al resultado final de la elección. 

De modo que los resultados de las encuestas fueron equivocados solo para las de los Grandes Medios. Por supuesto ellos propalaron a los cuatro vientos sus predicciones engañando incautos. Pero los resultados de las encuestas fueron certeros para los encuestadores independientes. No existió por tanto el “error” de las encuestas. Existió sí la voluntad de los Grandes Medios de transformarse en agentes de Hillary Clinton acomodando los resultados de sus encuestas a los requerimientos de la campaña de la candidata demócrata.

Ya sirvió el éxito de Trump: dejó de manifiesto a los ojos del Gran Público que la Mass Media es mentirosa y que sus intereses no son los de la ciudadanía ni de la democracia norteamericana. Muy certera la intuición de la mayoría de los ciudadanos que le dio el triunfo a Trump para que renovara radicalmente la política de Estados Unidos. Si Trump falla en este empeño bien incierto se ve el futuro de la democracia en la que se llama a sí misma "la Nación Excepcional".

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