Cuatro columnas anteriores de este Blog
analizan las condiciones financieras de LATAM antes de la Pandemia, la
debilidad extrema en que estaba al momento de la aparición de ella, las
dudas que nacen de la información financiera y del recurso al Capítulo 11 de la
Ley de Quiebras de Estados Unidos y las reacciones casi de rebaño, de
parlamentarios y del Ministro de Hacienda que repiten ad nauseam la majadería
de LATAM empresa estratégica.
LATAM gestiona desde al menos dos
meses, un aporte del Estado de Chile que contribuya a rescatarla de la crisis
financiera en que se encuentra. Crisis que nació de criterios de negocios que
aportaron espectacularidad a esa compañía pero que terminaron en una situación
financiera casi imposible ANTES de la llegada de la Pandemia.
Después, el huracán del Covid-19 arrasó a LATAM y la llevó a
buscar protección ante sus acreedores acogiéndose al Capítulo 11 de la Ley de
Quiebras de los Estados Unidos.
Antes que ningún peso o ninguna garantía vaya en socorro de esta compañía, el Ministerio de Hacienda y los Senadores de la Comisión de Hacienda deben hacer un análisis profundo y acabado de LATAM para aclarar las dudas que surgen de sus cuentas. Cada peso de garantía o de préstamo a LATAM es un peso que se sustrae a la ayuda imperiosa a compatriotas que hoy lo pasan mal, muy mal.
Hasta ahora el argumento final para apoyar a LATAM es su aparente condición de "compañía estratégica". Es la explicación que manejan los senadores y el Ministro de Hacienda. ¿Explicación? En absoluto. Un concepto vago y difuso, que nadie define. ¿Qué significa? ¿Qué ninguna otra compañía del mundo puede reemplazarla? ¿Por qué? Las disposiciones legales hoy autorizan a cualquier compañía aérea extranjera a ofrecer vuelos en el territorio nacional.
Sky, Jetsmart y otras más pequeñas, tienen a pesar de la opresión de LATAM, el 41% del tráfico nacional. ¿No tomarían gustosos el tráfico que hoy atiende LATAM? ¿No sirven las compañías internacionales para transportar a los chilenos al extranjero? ¿Air France, Lufthansa, Delta, American, United, KLM, AeroMéxico, Emirates, Alitalia, Iberia, British Airways, Copa etc? ¿Acaso no son dignas de recibir a pasajeros chilenos?
Para la carga aérea internacional, hay de sobra compañías
internacionales que podrían en breve plazo reemplazar a LATAM. Para ellas el
tráfico de carga del mercado chileno no es en absoluto despreciable.
¿Hizo desaparecer el virus a las flotas de aviones en el mundo y también a las tripulaciones? Que se sepa, el virus no destruye aviones. A muchas flotas las desocupa de sus compromisos habituales para atender tráficos disponibles en el lugar que sea (para los aviones el mundo no es ancho ni ajeno). Lloran y llorarán sus dueños por quien quiera contratar sus aviones.
Podrían haberse informado Parlamentarios y el Ministro de Hacienda sobre quién está detrás de Jetsmart. Para conocimiento de ellos se trata de Indigo Partners, un fondo de inversiones de Estados Unidos especializado en aviación comercial. Accionista de la segunda compañía de bajo costo en Europa, Wizz Air y de Volaris en México. Controlador de Frontier en Estados Unidos y de Jetsmart en Chile, ambas compañías de bajo costo. Indigo Partners en Noviembre del 2017 firmó un acuerdo con Airbus por 430 aviones, de los cuales 70 están destinados a Jetsmart con base en Chile. Es el mayor acuerdo firmado en la historia de la aviación. Parece elemental que los parlamentarios que corren al socorro de LATAM al menos se preocupen del calibre del competidor que viene encima de la compañía que quieren apadrinar con los dineros de todos los chilenos. En época de Pandemia tanta frivolidad "clama al Cielo".
¿Qué otra cosa puede significar esto de "compañía estratégica"?
El concepto huele y mucho, al catastrófico virus del proteccionismo del que fueron tan adictos los empresarios chilenos hace 50, 60, 70 años, un virus que embota la capacidad creadora y sumerge a los que se contagian en un letargo que arruina al país. Chile lo probó con creces porque fue deporte nacional inventar "empresas estratégicas" para conseguir la "protección" del Estado.
Al fin de cuentas pareciera que las aventuras sudamericanas de LATAM contagiaron a sus Directores y Ejecutivos con las "geniales" ideas tan en boga en Brasil y Argentina, y que parecían desterradas del ideario chileno. En esos países las empresas "estratégicas" son la piedra al cuello de sus economías, la mejor garantía de su mediocridad y del camino a la pobreza para sus poblaciones.
¡"Empresa Estratégica"! ¡Imbecilidad estratégica! Proclamada por "distinguidos" senadores y sorpresa, sorpresa, por el Ministro de Hacienda, el Sumo Sacerdote de la cultura económica del país.