jueves, 3 de septiembre de 2020

El Misterio del Libano Tiene Nombre



El Líbano en el siglo XXI  se hace cada día más importante en el Medio Oriente. Hoy es clave en el sistema militar que asegura la integridad de Irán y hace muy difícil las maniobras de Israel para consolidar su posición. 

Hezbollah

Hace más de treinta años Irán apoyó la formación y desarrollo de Hezbollah en el Líbano, un ejército paralelo y más potente hoy que el Ejército oficial del Líbano. Uno de sus rasgos distintivos es una gran capacidad en Inteligencia, fundamental porque su  enemigo principal es Israel. También destaca por sus obras de defensa en el sur del Líbano copiadas del modelo de Corea del Norte, muchas subterráneas. Sus armas y arsenales se dice están distribuidas en las viviendas de la zona sur del Líbano lo que habla de la adhesión a toda prueba de la población en los lugares que opera: población shiíta o refugiados palestinos.

Ha sido muy importante la colaboración de Hezbollah en la defensa del régimen de Bashar al Assad en Siria. Más de mil de sus soldados muertos en la Guerra Siria son indicativos de la decisión con la que ha combatido Hezbollah en ella. Los diez años de guerra en esta país le han servido para templar a su gente y le han dado una experiencia de combate más que respetable. 

Hezbollah se consagró como ejército hecho y derecho  con la Guerra del 2006, una invasión del Ejército Israelí al Líbano de donde éste se retiró humillado por las milicias de Hezbollah que mostraron su valía al derrotar a uno de los ejércitos de más prestigio en el mundo. Un capítulo triste en la historia de las armas israelitas.

A partir de ese momento Hezbollah abandonó prácticamente sus acciones guerrilleras y se transformó en la poderosa arma disuasiva que es hoy, en una barrera eficaz para contener cualquier ataque a su Padrino, Irán. ¿Cuál es el secreto de Hezbollah para contener a un Israel que puede atacar con bombas atómicas y destruir a Irán? El viejo secreto de la Guerra Fría, la Mutua Destrucción Asegurada. Es claro que si Irán y Hezbollah atacan a Israel y tratan de destruirlo, Israel destruirá con sus bombas atómicas a Irán y al Líbano. Pero si Israel quiere destruir a Irán Hezbollah dejará caer miles de misiles y cohetes sobre Israel (se dice que al menos Hezbollah tiene un arsenal de 150.000 cohetes y un número indeterminado de misiles)  que cumplirían el mismo efecto que bombas atómicas: la destrucción de Israel. Ningún bando saldría victorioso. Cualquiera iniciativa militar de uno de ellos puede significar la destrucción de su propio país. 

 
Corea del Norte le mostró a Irán el camino que lleva a una defensa eficaz. Sufren del mismo mal. Corea del Norte  no ha podido desarrollar su armamento nuclear para disuadir cualquier intento de ataque por parte de Estados Unidos o de sus aliados orientales. A cambio ha situado al menos 15.000 cañones que amenazan a Seul desde la frontera con Corea del Sur. Así cualquier ataque a Corea del Norte significa la destrucción inmediata de la capital de Corea del Sur, una ciudad de más de veinticinco millones de habitantes

Israel podría dejarse caer sobre Hezbollah pero arriesga una lluvia de cohetes y misiles sobre su territorio y el enfrentamiento con un ejército que lo derrotó quince años atrás y que desde entonces ha de haber aumentado fuertemente su poderío. Razones muy poderosas ha de tener Israel para no cobrar el desquite a Hezbollah por la derrota del 2006. Israel no puede dejar incólume a un enemigo que lo derrotó en algún momento. Su equilibrio es demasiado inestable para permitirse esos lujos y si no ha atacado no ha sido por falta de ganas. ¿Qué explicación entonces? Muy probablemente un aumento importante del armamento de Hezbollah en el Líbano para disuadir una nueva aventura israelita. 

Hezbollah en Iraq

Irán impedido de desarrollar su armamento nuclear por Estados Unidos, China, Rusia y los principales países europeos, se las arregló para construir un sistema defensivo que cumple el mismo propósito, la destrucción asegurada de su gran enemigo de la Región, Israel. Para ello formó y entreno en Iraq un Ejército parecido a Hezbollah y que lo complementa, paralelo al Ejército oficial de Iraq. Surgió para combatir la aparición del ISIS al que el Ejército de Iraq le había dejado la cancha libre en el Norte del País.  

Increíbles niveles de corrupción o de penetración por agentes extranjeros neutralizaron al Ejército de Iraq para combatir eficazmente al recién llegado ISIS. Así éste se apoderó de Mosul y de buena parte de Iraq. De paso arruinó las licitaciones que habrían llevado a Iraq a convertirse en la gran potencia petrolera del mundo.

Tanto Irán como Iraq pueden producir al menos tanto petróleo como Arabia Saudita y operar a precios muchos más bajos que lo del mercado. Salta la pregunta entonces ¿Por que Iraq fue atacado por Estados Unidos el 2003 y por qué impide a punta de sanciones el desarrollo de Irán? Estados Unidos se ha convertido en los últimos diez años en el principal productor de petróleo del mundo. ¿Lo habría logrado si Iraq e Irán hubiesen podido producir petróleo a niveles acordes con su potencial, provocando en el mercado precios bastante más bajos que los que ha pagado el mundo? 

La intervención de las Milicias formadas por Irán permitieron que Iraq se salvará del dominio total del ISIS. Hoy Iraq es muy cercano a Irán a pesar que en él aún hay presencia militar de Estados Unidos, una de cuyas bases fue atacada por misiles con precisión quirúrgica por Irán (como para tomar nota de los progresos técnicos de Irán) en represalia por el asesinato del General Soleimani, gran jefe militar de Irán.

Hezbollah en Siria

Siria es el otro eslabón del sistema defensivo de Irán. Allí el régimen del Presidente Bashar Al Assad con el apoyo de Rusia, de Irán y Hezbollah ha derrotado al Estado Islámico y a las otras guerrillas promovidas por Turquía, Occidente y sus aliados en el Golfo Pérsico. El fin de Bashar al Assad significaba la destrucción de buena parte del sistema defensivo de Irán al perder un aliado, Siria, y quedar aislados el Líbano y Hezbollah. 

El Medio Oriente es un lugar donde más vale apreciar que "nada es lo que parece". La emergencia del llamado Estado Islámico es una buena confirmación. Hoy es claro que si el ISIS hubiese salido triunfador se habría apoderado de buena parte de Iraq y de Siria anulando la conexión de Irán con Siria y Hezbollah. Irán se habría visto en un serio aprieto y  Estados Unidos e Israel habrían logrado un objetivo mayor en su afán de controlar a Irán. La Guerra en Siria no era como parecía, solo un cambio de régimen; las consecuencias estratégicas para el Medio Oriente habrían sido mayores.

No es disparatado pensar entonces que tras el fanatismo religioso del ISIS se ocultaba un propósito militar de primer orden para Turquía, Estados Unidos y sus aliados en el Medio Oriente (Israel, Arabia Saudita, Jordania. Emiratos Árabes). 

Irán

La imagen que se muestra de Irán en Occidente es la de un país del Tercer Mundo dominado por el fanatismo religioso y del que por lo tanto, poco se puede esperar. Una imagen contradictoria con la de un país heredero de una cultura milenaria, que ha logrado construir un sistema de defensa en el Medio Oriente capaz de enfrentarse  con Estados Unidos e Israel. Y ello a pesar que Estados Unidos se las ha arreglado para limitar sustancialmente la producción de petróleo iraní la que el 2019 según la CIA fue solo de 2.2 millones de barriles diarios habiendo alcanzado a 6 MBD en 1973. Esto en un país que al menos tiene un potencial petrolero igual al de Arabia Saudita (12.2 MBD el 2019). Sin embargo en estos últimos meses Irán y China afinan un convenio que permitirá una inversión de China en Irán por US$400.000 millones orientada a la actualización de la industria petrolera  y a la mejoría de carreteras y medios de comunicación. De manera que Irán pronto será parte de la constelación china. Así las cosas no es difícil imaginar la asociación militar de ambos países para contrarrestar a Estados Unidos con lo que el Líbano pasaría a ser una punta de lanza de esta asociación gracias a Hezbollah. Rusia por su parte mantiene una buena relación con Irán con quien coopera estrechamente en la defensa de Siria.

¿Ataque al Líbano?

El ataque contra Irán debe comenzar por el Líbano. Difícil que sea un ataque militar porque Israel se expondría a daños muy
graves. Parece a estas alturas que lo práctico para Israel es tratar de fomentar la discordia interna en el Líbano para aislar y  anular políticamente a Hezbollah. No parece ser una tarea difícil habida cuenta del pluralismo religioso que obligó a los ciudadanos a llegar a un acuerdo muy rígido para gobernar el país (participan cristianos, sunnitas, shiitas y drusos) y las difíciles circunstancias económicas por las que atraviesa hoy. Es posible que "la explosión del Nitrato de Amonio" en el Puerto de Beirut que pasa por un accidente, haya sido (parece ser un secreto a voces en el Líbano) un atentado para destruir un arenal de Hezbollah y así provocar la ira de buena parte de la población en contra de Hezbollah.

PS  

El blog The Saker publicó recientemente una columna sobre el eventual conflicto militar de Hezbollah con Israel y Estados Unidos con las opiniones de un representante del movimiento Libanés que explica la situación militar después de 14 años desde la invasión de Israel al Líbano el 2006.

En Junio Estados Unidos sancionó a Siria con el US Caesar Act, un nuevo caso de extra territorialidad de la ley norteamericana. Se hará extensiva a Rusia, Irán y Hezbollah. Podría ser la gota que rebalsa el vaso y generar una respuesta militar de Irán, Hezbollah, Siria y las fuerzas shiitas en Iraq. 



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